Sola sin la multitud

Ya no quiero más silencios

en los adentros de la

controvertida razón

de este apartado corazón,

que me alejo de tu amor.

Si te asomas a mi mundo

me veras allí sin nada:

vacía de tu terca ingratitud,

sola sin la siniestra multitud,

bañada por la dulce soledad

y rodeada del divino Amor;

ese que siempre perseguí,

y que ahora por fin, conseguí.

 

Según el argumento de su bello poema... al final de todo consiguió lo que tanto anhelaba en la vida.
pero hay casos más tristes, parejas que siempre se amarán en silencio, por tantas circunstancias.
Un placer encontrarla por estos lares... despertando.
Cordialmente:

 

Así es querido Iván, al final encontré lo que deseaba en el profundo interior de mi corazón, ahí está un manantial de amor y una suave brisa que me llena de paz y de plenitud en muchos días de esta mitad de la vida. ¡Todo está en el interior...! Un fuerte abrazo.

 

Un poema de cierta melancolia, con un final feliz. Un placer leerte.
Un abrazo fraterno poeta.

 

No depender de otros, para contactar con el cielo, a través de un corazón abierto, de par en par ( abierto, virtualmente hablando, claro ), es fantástico. Muy atrevido. Es como el juego de beso, atrevimiento o verdad. Todo, a la vez.