Mujer se sal vs. fiera marina.

Allí sobre la alfombra de tibias nubes, te maldije,
dejando mi verdad en tu cuello alambrada,
y es que intensamente esa furia encarcelada
como de sombra fúnebre, a obscuras me rige.

Al borde mismo de mis tinieblas hondas
me tortura la sangre, me busca, me persigue,
y araño con voces destempladas y hoscas,
la vida, la luz, que a su cuerda me ligue.

Me escondo bajo el agua y en el caudal se mezcla
mujer de sal o o fierecilla marina,
allí esa alimaña, a herir, me sentencia.

Mas vuelve a mis pasos en andar de peregrina
la luna, en el fondo, escuchando mi clemencia
¡Qué vuelvo a ser la luz que ya daba por perdida!





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Vuelves a ser la luz que puebla el horizonte.
La crema de la crema. La tarta, con su guinda.
El pulpo a la gallega. La tortilla española.
Los crèppes franceses con miel, fragancia parisina.

 

MiL GRACIAS mi poeta Nommo, vuelvo a ser luz porque a pesar de todo seguimos escribiendo y plasmando nuestro sentir, todos estos platos que os mencionais suenan todos muy ricos jejeje y ole!! deberia yo luego probarlos ;P, un placer encontrarte de nuevo, saluditos pa ti

 

Mil gracias estimada Bristy, me gusta encontrarte entre mis sencillas letras y que encuentres dentro de todo una pequeña luz, otro abrazo para ti

 

Cómo un dolor que alivia así son nuestras maldiciones.
Un placer.
Saludos.