poema de piedras

Como éstas calles de roca
siento el peso de las poesías, conspiratoriamente celebrando
a tu suave boca, a ti, ángel de mis brazos.

Y aunque lejos de ti,
la distancia nos aune porque
por tus ojos o los míos somos,
porque el amor nos llena a ambos.

Entonces
sobre éstas calles de piedra,
tan duras como el vivir,
veo florecer a una rosa,
tierna y grata de deleite
porque por ella y aquí en Salento
nació éste, tu poema.​

Nunca antes había visto a un avión junto a mi si no hasta que me bajé de él en Armenia, Colombia. Sí, después de haber tocado las nubes, estaba ahí, sobre el pavimento, ésta enorme nave amarilla partiendo aún, con su rugir de motores, aquél cálido viento de un atardecer colombiano que me vió llegar.

Siempre me a gustado cerrar los ojos al volar, ponerle un tono musical a los vientos e imaginar que, sin la ayuda de esas inmensas alas mecánicas, soy yo mismo el que está volando.

Como cuando era chiquillo, al ver al avión tan de cerca me dieron ganas de treparme en su cola, correr por su espalda o lomo y colgarme de sus altas alas. Pero claro, la policía nacional colombiana estaba allí, protegiéndolo como si un tesoro de los truenos.

Fidel Guerra,
Salento, Colombia,
enero, 30, 2020.

 

Poema de piedras...
Poema de pirámides.
Poema de calendarios mayas y aztecas.
Poema de cataratas del Niágara.
Poema, en definitiva, del juego de pelota vasca.
Poema de esta perra vida...





Manos encallecidas, músculos prietos, buena puntería y frontón.

 

Estimado Nommo,
hay poemas de emoción segura,
otros que se dan o se pasan como
un avión por una ciudad que aparece
bajo las verdes paredes de una montaña.

Un ambiente natural y más grande que mi propia inspiración me dió estas palabras y la aparición de una invisible sonrisa en unas rocas.

Compañero,
gracias por tu tiempo, por tus comentarios, tan bellos y decorativos como las crestas de un gran gallo poético.

Fidel Guerra

 

Sin Baskonia, la Humanidad no avanza.
Pero hay muchas otras tribus interesantes, en este planeta.
De modo que nunca se puede uno decidir del todo, por apostar toda su riqueza, a una u otra región.
Además, la Filosofía no es un Casino de Las Vegas.
Pero sí, el gallo simboliza la pelea, y también, ¡ Madrugar !
¿ Por qué luchamos ? ¿ Por qué no confraternizamos ? ¿ Por qué no nos damos cuenta de que somos niños pequeños ?


Porque los grandes paisajes, nos asombran. ¡ Eso es por alguna razón !
Que no somos el Creador. No somos el Absoluto.
Ni tampoco, centro del Universo.
Y así, más apaciguados, podremos tolerar las siete diferencias, entre un cómic y otro.
O las siete diferencias, entre un Foro de Internet, y otro.
O las siete diferencias, entre un país del mundo, y otro.


Etc.

 

Estimado amigo aquí y alla apoyando tus letras,
besitos de colores y que disfrutes tu viaje,

 

Siempre habrá encanto en esas flores que crecen entre las rocas.
Conmueve la idea del corazón abriéndose paso y manifestándose.
El amor es exactamente eso, la vida que se impone sobre los grises.
Me alegra mucho que tus vivencias recientes te hayan hecho escribir, amigo mío.
De verdad extrañé tus flows, pero ya podré de a poco ir poniéndome al día.
Hugs con admiración desde el sur.

 

Dear Guadalupe,
gracias por el apoyo y presencia, tan significante para este poeta de diminutas glándulas poéticas. El mundo, aunque algo crazy, no deja de ser bello. Por eso, por la bendición del poder viajar aprovecho admirar los paisajes, a una simple rosita que extendió sus colorcitos mágicos para decirme hola y la oportunidad de admirarla con una poesía.

Gracias,
Fidel Guerra.

 

Cecy,
admiro ilustres lo que te gusta de mis poemas.
Si amiga, leer esa semillita de mi sentir tiempo despues es un dulce misterio. Viajar por ese momento poetico que nos asombró una vez es volverlo a vivir al sabor de las respuestas.

Yo estoy feliz que pude escribir porque no fue fácil de hacer cuando andas up and down pasándola bien,
knowing places, people, listening to music, enjoying food and sharing the real you, not the touristic one.

Amiga del bello sur,
la verdad no entiendo por qué todabia le florecen poemas a mi mente. Sé que te molesta si digo no ser lo que vos dices que sí soy, pero hay días en que me siento incapaz de alcanzar el néctar de una primera estrofa y eso, dear friend, si que es otro tipo sufrir.!

Un jardín de hugs,
Fidel Guerra.