Poema escrito con tinta de estrella de ébano

He soñado que contemplo los rasgos psicóticos de mi sombra siniestra,
cuya personalidad brutal es mi propio espejo.

Cabizbajo, meditabundo, sumergido en un mundo bizarro
donde fluyen emociones torcidas difíciles de describir.
Es aquí donde mi embeleso superficial admira la naturaleza oscura
de mi yo enterrado en la dimensión de las estrellas de ébano.

Un yo espectral que conserva cierta luminiscencia de limitada densidad,
un ente que vuela sin alas, que conversa sin boca, que calla y sueña
con una figura resplandeciente, dueña de una mente clara,
de altísima comprensión, y un alma virginalmente pura
que fluye veloz como la luz, que es magníficamente hermosa,
valiente, perfecta.

Soy un gris disfuncional en el reino de los inhumanos,
soñando lo más remotamente posible
con distintos yo alternativos que habitan en diferentes
universos y dimensiones de un origen desconcertante,
de despreciable arquitectura imperfecta, como su creador.

Por ello me pierdo de la realidad, no deseando volver,
no deseando que nadie jamás se entere de mi.

Quiero estar aquí, mirando con un deleite abrumador
La danza de las almas perturbadas que se niegan
a recibir afecto en diminutas dosis, por ello huyen
del cariño superficial que brinda el mundo humano,
prefieren la lunática sonrisa de un hombre
mitad sueño, mitad realidad,
hecho de estrellas, de arena y de sal, más nunca de agua, ni sangre
nunca de armonía, nunca de murmullos latentes de paz.

Paz es lo que mas quiero.
Claridad es lo que más sueño.
Felicidad es lo que anhelo.
Mientras descubro los tesoros y las virtudes
que solo han sabido disfrutar los Ángeles,
yo seguiré escribiendo poemas con tinta oscura.
​

 

Profundo y muy sensible dulce amigo... una confesión que conmueve...
Es muy grato volver a leerte...te abrazo con todo mi cariño...
Nancy

 

Daniel, y yo que te pensaba en los abismos,
deseando ver tu sombra entre los brillos de las estrellas,
y estabas aquí, mutando tus grises motivos,
con tu tierna mirada de niño tímido,
con el amor enterito entre caracolas resguardado.
Escribe cuanto quieras, siempre mostrarás la otra cara
de la luz desde donde mejor se puede admirar ella,
eso me lo enseñaste tu.
Mi afecto y admiración para tu poesía y tu persona.
Un abrazo de luz.

 

La tinta será oscura, pero no importa el color en tanto la luz sea ese anhelo.
Leer tus mundos de letras es siempre un placer exquisito, es hallar una particular espiritualidad que sale de lo común, y eso es fantástico.
Felices días de diciembre, te dejo un abrazo con admiración.