Tanka (siete)

¿Cómo podrían
los pinos siempre verdes
reconocer
que existen en el viento
las fuerzas otoñales?​

 

¿Reina yo? ¡Qué va!, jaj, no, mi apreciada Bristy, estoy intentando practicar mucho, eso sí. Te agradezco con el corazón tus comentarios, y que te agraden mis intentos. Abrabesos en tu alma generosa.

 

Hermoso tanka, poetisa Ropitela, saludos.
Azalea.

 

Mil gracias Azalea, me gusta mucho que te parezca hermoso. Abrabesos en tu corazón tan generoso.

 

¡Millones de gracias María! Que tengas un excelente segundo a segundo. Abrabesos en tu corazón.

 

Compañera Ropitella fue un placer pasar por tus letras

 

¡Mil gracias Mary! Mealegra que te gustara. Abrabesos en tu corazón generoso.

 

GRACIAS totales Marlenne, cierta tu interpretación, no se puede sentir lo que no se experimenta, nadie debería opinar sobre los sentimientos que desconoce, sobre los dolores que desconoce. Mas ese doble sentido también nos estaría mostrando la otra cara de la empatía, que es que no podemos juzgar a los pinos por haber nacido como nacieron. Ningún niño pobre nace delincuente y ningún niño rico nace para explotar a los pobres. Vulgarmente decimos: Hay de todo en la viña del señor... Sin tanto prejuicio todos los seres humanos podríamos ser ricos y vivir de la ley del menor esfuerzo, pero los prejuicios son los vientos huracanados que en cualquier estación nos dejan sin hojas, sin pensamientos de grandeza para reconocernos uno con los demás. Uf, que ya estoy hablando demasiado, cuando más quiero sintetizar escribiendo tankas , me gana la parlanchina... Gracias por llegar y dejar huella. Abrabesos en tu corazón generoso.

 

Que sigan los otoños así nos regalas inspiradores poemas


Saludos