Liras ligadas logran labrar los lúcidos locos

No quise hacerte mal
has dicho que te herí y estás perdida
niña angelical
por ti quemé mi vida
has sido mi pequeña consentida

 

Me cumple mis caprichos
que son solo mirarlo diariamente,
A veces dice dichos
que me aclaran la mente,
mas otras son poemas elocuentes.​

 

Pareces una diosa
Envuelta en ese abrigo de visón
te mueves vanidosa
¿Puedo, con tu perdón
decirte que el orgullo no es un don?

 

En ideas te entramas.
Las enredas, estiras y las tejes.
A veces dices que amas,
otras, que no me dejes.
Tus argumentos son tejemanejes.​

 

La danza es contradanza.
En este ir y venir, luego me pierdo.
Sonríe la esperanza,
mas bailo con pie izquierdo.
Del dolor de la ausencia aún me muerdo.​

 

Ha sido gran hallazgo
encontrarte rimando nuevamente
es por tu liderazgo
que a veces reticente
ejerces sin querer y displicente.
​

 

Su salud está atroz
solo ayuda el beleño, le da paz.
Mas silencia su voz,
del canto es incapaz,
a veces brota un verso que es fugaz.​

 

Quisiera en tus pupilas
mirar a lo profundo de tu mente,
mas siempre me encandilas
y te escondes renuente
a mostrarme tu rostro, displicente.​

 

Pareces como ausente
que triste tu enigmática sonrisa
me miras de repente
como la Mona Lisa
nada entiendo, por irme siento prisa

 

Por ser la pitonisa
que en mis sueños de sexo se revela,
no has de ser Artemisa.
Me dejarás secuela,
la que dejan maestras de esa escuela.​

 

Me encantó la velada,
pude volver a verte, tan amable.
Tu suerte estaba echada,
me lancé como un sable,
y atraje tu atención, fue formidable.​

 

Cómo esperas que te hable
si dejó de importarte lo que pienso
quieres que sea amable
dices que soy propenso
a los celos, ¿qué quieres? soy intenso.

 

Con la mirada enhiesta
observaba a los cuervos allá en la era.
Tuvo idea funesta,
pensaba que si él fuera
un cuervo, mataría al que pudiera.

​

 

Soy amante del arte
en todas sus variadas expresiones
forma el poema parte
de mis predilecciones
toco la guitarra y canto canciones

 

Recuerdo tus canciones
y el anhelo de verte se hace intenso.
Evoco sensaciones,
el dulce aroma denso
de tu piel en mi abrazo, tú indefenso.​

 

Cuando te escribo, hermosos
sentimientos azules me desbordan.
Y son tan deliciosos.
Pues son versos que abordan
solo temas de amor, que en oro bordan.​

 

Los requiebros se asordan
más allá de los límites del trazo
mis deseos desbordan
breves como un chispazo
un beso te he pedido y un abrazo.