Tercetos encadenados

A la pandilla me uno
ya estoy harto de tanta sensatez
desde ahora en los bares me reúno.

 

¿Cómo satisfacer mi pretensión
de ser acaudalado al jubilarme?
Robo el Banco Central de la Nación.​

 

Trabajo en el estanco
vendo revistas, prensa y lotería
acostumbro a tomar sol en el banco

 

Leo revistas en la peluquería.
No es buena selección y el manicuro
me mira con rarísima alegría.​

 

Es pura cobardía
pura angustia por esta soledad
que me cubre cual polvo con su umbría.

Perdón, ahora rectifico.

Así ya no me apuro
y corrijo de nuevo este terceto
el anterior tenía tema duro.
​

 

Esto es pura ambrosía:
mis sentidos se embriagan con deleite,
me saca de una vida gris y fría.​

 

Déjame que me afeite
y que me duche antes de salir;
también me aplicaré algo de aceite.​

 

No me gusta tu forma de vestir,
no sigues los dictados de la moda
ni sé qué es lo que quieres trasmitir.
​

 

No quiero ir a la boda,
no sé por que se casa esa mujer
con ese hombre que siempre la incomoda.​

 

La sedujo el placer
de una vida opulenta y sin zozobras.
Aborrece el trajín de un menester.​

 

Siempre les guarda sobras
compasivo a los perros callejeros
él es caritativo en otras obras

 

La maniobra violenta
del piloto volcó mucha comida.
Detesto que mi panza ruja hambrienta.​

 

Estaba desvalida,
en mitad de la calle y sin cobijo,
soñando con la tierra prometida.​

 

Proteger siempre al hijo
es su razón primera cada día
sueña con un futuro regocijo

 

Es mi amigo Gervasio
hombre de gran salud y fortaleza
y con un nivel alto de potasio.​

 

Tal vez banana es, en su firmeza,
con sus niveles de potasio altos.
Dulce fruta, Gervasio, gran belleza.​

* Nota: ha quedado así, nada más. No critico nada. Era una rima muy complicada ese “-asio”. “Altos” tampoco es tan sencilla.

 

Produce sobresaltos
porque padece vértigos de altura
pero se esfuerza y cruza por los altos

 

Si bajan de sus cetros
de arrogancia, seguro que aplaudimos.
En ínfulas, nos sacan varios metros.​

 

Cuando nos conocimos
el mundo estaba oscuro, tenebroso,
y la luz fue que en todo coincidimos.​

 

Un círculo vicioso
enredado sin fin y sin principio
me parece bastante peligroso.
​

 

Dicen que el participio
hace siempre la rima muy sencilla.
¿Es tan exasperante como un ripio?​

Nota: bueno, no es para tanto.

 

Me fue un desconocido
un viejo compañero de la escuela.
Nos cruzamos ayer en el partido.​